var memory = 0; var number = 0;

<+ reflexión / análisis / acción / transformación / +>

31.7.05

Los jóvenes y la participación social.


Me tomo la libertad de linkear esta nota del diario conservador "La Nación" http://www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=724110&origen=premium, en la cual no se hace otra cosa que aseverar lo que ya conocemos respecto del desinterés generado por treinta años de vaciamiento de las instituciones políticas en Argentina y la acumulación creciente de poder en cada vez menos manos, que hicieron (y siguen haciendo) mal uso de los recursos del estado.

Sin embargo, y paradojicamente opuesto a los intentos de las poderosas estructuras y sus lacayos, se vislumbra una luz en el mediano plazo. Se detecta en los jóvenes un interés creciente por las cuestiones públicas, que choca con su mirada negativa sobre las estructuras políticas tradicionales y termina muchas veces canalizado en ONGs y trabajo voluntario, o en estructuras políticas nuevas.

Los jóvenes son un grupo social que puede contruir signos y símbolos con contenidos propios además de poseer una visión particular del mundo lo que me permite reafirmar una de las características de la juventud que es su capacidad creativa. Esa capacidad y su sensibilidad son entre otras las virtudes de los jóvenes, que al ser desarrolladas y puestas a disposición de una organización pueden habilitar a la transformación del medio social, y en el proceso decantar en personas conscientes y útiles a la sociedad.

Esto último me parece muy interesante ya que debemos aprovechar lo mejor que tiene esta generación para dar:
Su sensibilidad hacia las cuestiones sociales, su necesidad de transformar la asfixiante realidad que les toca vivir en algo trascendental y superador de la violencia existente.
Creo que es importante el trabajo realizado por los humanistas en este sentido, que sirve para darle a las nuevas generaciones herramientas transformadoras, tanto en el ámbito político y social como en lo personal.

Esta es una generación que se siente desprotegida por el sistema, que no se banca la inacción y tiene ganas de hacerse su propio lugar. Es una generación que se ve reflejada en cada joven que no tiene posibilidades de futuro, en cada joven que tiene dificultades para estudiar o acceder a la educación, en cada persona que no puede ingresar al mundo laboral, y en cada ser humano que no se alimenta como corresponde. Es inevitable, se nota que no es una generación que ha vivido bajo el yugo de las dictaduras. Es una generación que no tiene miedo a cambiar el modelo y romper con las viejas estructuras.


Es una generación que necesita más que nunca herramientas para acelerar el proceso de transformación de esta sociedad viciada, y a los humanistas nos corresponde ayudar para que así sea.
Sigamos ayudando a abrir el FUTURO!!!
Marcos Bauzá.

26.7.05

Del copista medieval al Blogger


Arnau ha escrito en su blog una entrada muy interesante. Del copista medieval al blogger que vale la pena leer y, a riesgo de ser considerado un copista, me gustaria copiar algunos fragmentos y dar una opinión acerca del valor que los bloggers agregan a este concepto:

"A lo largo de la edad media, los monasterios se convirtieron en focos de cultura. La importancia de un centro monástico era directamente proporcional con la calidad y la cantidad de los libros que se copiaban y de los fondos de su biblioteca, que se convertían así en el más preciado tesoro (Si alguno se lleva este libro, que lo pague con la muerte, que se fría en una sartén, que lo ataquen la epilepsia y las fiebres; que lo descoyunten en la rueda y lo cuelguen [anotación al final de un códice medieval])."En esto hay una de las ventajas de los bloggers. Mientras loc copistas generaban textos y la liberación de los mismos estaba en manos de otros (la institución o monasterio), cuando un blogger escribe, automáticamente todo aquel con conexión tiene acceso al mismo agregando algo valor, a veces no tanto, al conocimiento colectivo o participativo.

"Salvo muy honrosas excepciones (que las hay y con cierta abundancia), la blogosfera se limita a copiar. Un blog o bitácora de éxito lanza una noticia y los que la siguen la reproducen en la suya propia, enlazando, eso sí, el original inédito. ¿Qué sucede? Pues que un mismo hecho relevante sea repetido por todos los rincones del planeta."Es cierto y es interesante que, desde mi punto de vista, esta sea una suma al valor de un blogger. A mayor visibilidad de un tema interesante (mejor sería que sea importante) mayores posibilidades hay de generar algo en los lectores, aunque sea el simple hecho de enterarse de un hecho que de otra forma no se enteraría.Algo interesante tambien nota el post, la ventaja del linkeo. Los blogs fomentan una conversación comunitaria, donde cualquiera puede, al ver algo que valga la pena a sus ojos, referenciar (via trackback o un link) al que generó la noticia y por lo tanto darle mayor relevancia en Internet. Las conversaciones no pueden frenarse y esa, cuando se hace sin ganas de robar el origen de las mismas, es una de las mayores revoluciones a las que te podés sumar.

* El bloggismo se está transformando, a medida que avanza su difusión, en una nueva forma de hacer periodismo, poniendo en jaque a algunos formadores de opinión y medios que pretenden posicionar una única versión de los hechos. En la medida en que el común de los ciudadanos participa de la utilización activa de un medio masivo de comunicación, crece la presión sobre la prensa convencional, esta es una afirmación innegable y sostenible por la cada vez más importante participación de las personas en el uso de las nuevas tecnologías. El diario conservador argentino La Nación no hace otra cosa que reflejar sus propios temores en una interesante nota sobre el suceso.
Internet, la red global, o como quiera llamársele a todo esto, ha llevado a los periodistas, por primera vez que se sepa, a admitir en público que los lectores tienen para decirles cosas que ellos no saben; pero no para decirlas una vez, como si se tratara de una clásica carta de lectores: para decirlas de manera sistematizada, con una articulación de alcance tan general, o mucho más, que la de un diario.

Incluso aunque La Nación no lo menciona en su nota:
http://www.lanacion.com.ar/cultura/nota.asp?nota_id=708742&origen=premium , los bloggers pueden servir para difundir actividades y organizarse.
En fin amigos míos, nosotros, las personas tenemos mucho para decir, mucho por hacer, y los humanistas debemos saber aprovechar cada una de las grietas que nos son dadas de manera de organizarnos para seguir volteando las viejas y vetustas estructuras del sistema. A nuestro modo, sin violencia y con la gente, por supuesto.

*Marcos Bauzá.
Foto de la pintura "Dar la cara" de Daniel Zimmermann, .

25.7.05

Puntos de partida.


El mundo caótico en el que vivimos de modo acelerado, poco o nada deja para aquellos que sentimos que es tiempo de reflexionar de forma más profunda, cual es la dirección que queremos darle a nuestra vida y cual es el sentido de nuestra existencia.

Desde que nacemos, los seres humanos adquirimos la cultura de cada una de las personas del medio que nos rodea. Nacemos sin elegir muchas de las cosas que se brindan a nuestros ojos. A medida que el tiempo transcurre vamos adquiriendo algunas cosas del medio; algunas por voluntad propia, otras por ósmosis y otras por simple inercia o necesidad de tener un lugar en el mundo. Cuando logramos tener mayor seguridad, cuando afianzamos poco a poco aquellas cosas que queremos para nuestra vida, descubrimos que es el momento oportuno para la organización y la transformación de todo aquello que creemos necesario cambiar de ese mundo que nos rodea, de ese sitio que aunque hostil es propio, es nuestro lugar, nuestra casa.

De esta manera, con palabras sencillas pretendo dar lugar a la creación, a la inspiración de manera de superar la desorganización reinante, el desinterés hiriente de aquellos que sienten que sus actos son granos de arena ante un mar de incertidumbres. Con palabras más felices, prefiero pensar que esos granos de arena son pequeños puntos de partida ante un mar de infinitas posibilidades, reflejando la luz de un inmenso cielo repleto de brillantes utopías.

Marcos Bauzá.